No hace falta recordar que hace aproximadamente un año los trabajadores y trabajadoras de Capgemini sufrimos un ERE y, desde entonces, los rumores de que otro se nos venía encima no han parado de circular. Quizá nos tendríamos que preguntar: ¿qué ha hecho la Dirección de la empresa para corregir la situación?
Efectivamente, la respuesta la conocemos bien: nada. O, para ser exactos, si, han intentado recortar nuestros derechos
laborales, intento que fue, por otra parte, respondido por los
compañeros de Barcelona a modo de convocatoria de huelga indefinida. No se
han
adoptado medidas para mejorar la formación de los
trabajadores ni reducir el gasto que producen los privilegios de algunos
pocos frente a la congelación del sueldo de muchos.
Sabemos que la venta
de los Proyectos se hacen pensando en los objetivos de los omerciales y no en su viabilidad para asegurar los puestos de trabajos.
Sabemos
que se ha estado contratando durante todo este año en vez de
invertir en formar a los compañeros que se quedaban desasignados. En resumen, pan para hoy (para unos pocos) y hambre para mañana (para los de siempre).
Como ya hemos vivido esta situación en varias ocasiones, sabemos quién dirige y quien, si se sigue por este camino,
nos va a llevar más precarización y al paro.
Todo ello nos lleva a exigir a la empresa que retire el ERE,
que aborde de forma seria y contando con los trabajadores un
plan para hacer viable esta empresa, que el grupo Capgemini, que
presume de tener beneficios, apueste por su filial en España de forma
seria,
pasando por quitar de sus puestos directivos a quien ha
demostrado que es incapaz de hacer que esto funcione.
Por lo tanto, sólo hay una salida, la organización entre
iguales, que venimos practicando desde hace más de cien años en la
CNT, para hacer frente a quien quiere quitarnos lo que es
nuestro, y sin comités de empresa ni liberados sindicales.
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